Los que han nacido bajo el signo de la Cabra tienen pocas cosas claras en la vida. Su compromiso es irlas descubriendo una por una, en un deslumbramiento perpetuo. Y entre esos aspectos a descubrir se encuentra el amor.
De ahí que una relación con Acuario sea provechosa para ellos.
Cuando Capricornio conoce a Acuario se encuentra frente a una persona siempre en la exploración de la vida, en busca de experiencias, de nuevos sabores y vivencias. Y ese afán de descubrir lo lleva al plano del amor.
Capricornio gusta de seguir a Acuario. De aprender a la sombra de su gran vitalidad, de su inagotable curiosidad. Ambos forman un equipo siempre a la caza de lugares y experiencias nuevos. Entre ambos el aburrimiento no es algo que pueda suceder, ni tampoco la rutina (ese gran asesino del amor).
Lo que les juega en contra en que Capricornio cree a pie juntillas en el compromiso, en que toda alianza debe refrendarse con votos y reciprocidad. Algo que no se le da nada bien a Acuario.
Cuando Capricornio lanza los primeros reclamos sobre el poco compromiso de Acuario, este suele salir por la puerta más próxima, con toda celeridad. Es mejor que Capricornio no intente cambiarle.
Envía tu comentario